viernes, 10 de agosto de 2007

Bye, bye, birdie (Part One)

Durante tres semanas este blog permanecerá cerrado -por falta de personal... pues no tengo colaboradores que me sustituyan en mi ausencia y que vayan a limpiar las telarañas que irremesiblemente se formen en mi querido blog-. Me voy de vacaciones habiendo dejado listo todo para mi vuelta a la vida académica, laboral y social en septiembre. Toda mi lista de asuntos pendientes está comprobada y marcada con un "hecho". Y mañana, en contraste, me lanzo a la aventura, dirección a la frontera con Francia para coger nuestro primer tren hasta la Ciudad de las Luces. De allí, recorreremos un total de siete países distintos hasta llegar a Rumanía. Espero no desfallecer en el intento y morir en algun punto entre Italia y Grecia a bordo del ferry. ¡Volveré en breve cual serie con una nueva temporada!

Psd: Me voy con el alma en vilo con ese final de la quinta temporada de las Gilmore y dejando a medias "B&S" y a punto de finalizar "Desperate Housewives". ¡Adiós mis novelitas y dvds y adiós sábanas frescas con olor a lavanda y adiós a mis jerseys queridos y a mis calcetines limpios y siempre disponibles y risueños. ¡Adiós a todos!

jueves, 9 de agosto de 2007

Only God Knows... all about favors

Emily: ¿Hablabas por teléfono?
Richard: Llamaba a larga distancia
Lorelai: ¿Dios?
Richard: Londres
Lorelai: ¿Dios vive en Londres?
Richard: Mi madre vive en Londres
Lorelai: ¿Tu madre es Dios?
Richard: Lorelai...
Lorelai: Así que Dios es una mujer
Richard: Lorelai...
Lorelai: Y encima un pariente, genial, pienso pedir favores
Richard: Haz que pare
Rory: Como si pudiera

¡Aixxx, voy a echar muchos de menos a mis chicas! Si dispusiera de un generador eléctrico en mi cuerpo, me llevaría mi dvd portátil y mis mejores capítulos gilmore y me iría inyectando dosis para sobrellevar el mono con dignidad... ¡Únicamente me quedan cuatro capítulos para pulirme la quinta temporada! ¡Y un día y medio para irme de vacaciones cargado con mi supermegamochila XXl, mis libros antihastío para los largos recorridos en tren y mis montones de camisetas -para tener que lavar poco durante el camino-.

martes, 7 de agosto de 2007

Gilmore's Anatomy

El patriarca de las Gilmore cambia los seguros y los planes de pensiones por el Juramento Hipocrático para poder ejercer así la medicina en el casi desconocido Seattle Grace Hospital -"casi desconocido" por mí y por pura voluntad, claro-. Esta mañana mi compi del trabajo me ha informado de este trasbase interserial -¿ahora cambiará mi opinión sobre "Grey's Anatomy"?- y como no podía -o no quería creerlo- le he arrebatado el periódico para leerlo por mí mismo. ¿Mi fanatismo gilmoriano vencerá a mi aversión greyniana? Quizá viene siendo hora de dar crédito a mi amigo Nacho -que de series entiende bastante... bueno, "bastante" es no hacer justícia al vasto conocimiento que tiene sobre el tema- y dar una oportunidad a las dos primeras temporadas de la serie. O quizá deba mantenerme firme en mi postura antigrey porque tampoco es como si el Seattle Grace hubiera fichado a Emily, Lorelai o Rory... o aún incluso a Lane o la señora Kim... Es que Grey actúa como repulsivo en mi cuerpo y, aunque a veces es necesario tomarse un repulsivo para limpiar el mismo, es tanta la aversión que me tiene totalmente cegado... aunque, por otro lado, reconozco que es signo de buen ojo el haber contratado a Edward Hermann, por más que sus guionistas vayan a tener que esforzarse para darle un papel nuevamente suculento al veterano y querídisimo actor. Y es que las "Gilmore Girls" han dejado el listón muy alto.

Es cierto que me gusta ver como "mis" actores y actrices se buscan la vida y no permiten que la supresión de una serie les deje percibiendo el paro -que siempre me resulta más patética la situación cuando se trata de artistas...-, pero prefiero que este reciclaje se dé entre series que me gusten como en el caso de Treat Williams y Emily VanCamp son absorbidos por "B&S" después de que la estupenda "Everwood" finalizará repentinamente -o al menos, su emisión en TV1-.
Ahora sólo me cabe esperar un fuerte aluvión de ofertas para Lauren, Alexis y Kelly. Ya cuentan con algunos proyectos de películas para los próximos meses, pero no estaría mal que cayesen en alguna serie que nos las recuperase de forma periódica.

Y hablando de trabases, otro en el plano sentimental - que también se dan-, como en el caso de la relación (¿finiquitada?) entre T. R. Knight (George O'Malley, "Grey's Anatomy") y Luke MacFarlane (Scotty Wandell, "Brothers & Sisters"). ¿Otro motivo más para ver la serie?
Psd: ¡Quedan sólo tres días para pisar siete países distintos a lo Phileas Fogg y, también, para sufrir el mono de series más grande de mi vida!

lunes, 6 de agosto de 2007

The Last Great Week-end in Barcelona

Todo empezó con el secuestro de Doña Rogelia y Macario el viernes. Los amordazamos con trapos para que no pudieran gritar, después les atamos las manos a la espalda con cinta adhesiva que rezaba "Frágil" y finalmente los atamos fuertemente con un cordel el uno al otro. Además, hicimos otras gamberradas de diferente índole -al escribir "gamberrada", me he acordado nuevamente del chiste de la gamba, chicos- como llenar la casa de hilos con panderetas y cascabeles colgantes, hinchar dos centenares de globos -otra vez en menos de un mes, aunque esta vez éramos cuatro pares de pulmones menos para más inri-, precintar todos los electrodométicos y cuanta víctima se topaba con nosotros por el camino -incluída la suplicante caja de cereales y salvo la jaula de los periquitos o los canarios (que no me acuerdo la naturaleza de los mismos) porque las histéricas aves eran capaces de engullirse la cinta y morir asfixiadas-, etcétera... Después de nuestro gran golpe - gran golpe el que se llevarían los dueños de la casa -Felicitats Montse i Lambert!-, fuímos al chino,juzgamos equivocadamente a una de las camareras tildada de "borde", repetimos hasta la saciedad a todo el personal del restaurante que no queríamos café, bebimos chupitos de "lichi" o como diantres se diga y para acabar, robamos a Elsie las chapas de su bolso. La noche prosiguió por l'Eixample esquerre con nuestra particular versión del Ministerio de los Andares Tontos (originario de los Monty Python) que no nos permitía avanzar y después bajamos nuevamente hasta la Gran Vía y de allí hasta la mejor orchatería de Barcelona (aunque le pese a Elsie).

El sábado me encontraba con un cheese cake como compañero de viaje. Como el pastel no se encontraba muy bien, descansaba en el regazo de Ira (la tirititera) para que le diera de pleno el aire acondicionado. ¡No hay nada como ser un cheese cake para recibir tratamiento especial! Al llegar a la Palma, donde se encuentra la idílica masia de Xos, aparcamos en una pista de frontón cubierta por el espeso ramaje de una enredadera que trepa hasta el siguiente nivel, donde si sitúa señorialmente la rústica casita con su magnífico porche -en el que Miguel y yo holgazanearemos el resto de la mañana mientras se habla de Just for Laugh y las pésimas traducciones de las series y películas-. La tarde transcurre en un columpio que por su abuso produce una cadena de náuseas. Xavi nos deleita con su abanico de chistes y Marta y Quim nos llevan de paseo por la montaña y nos adentran en un pasillo de espesos arbustos -especial mención a los de la zarzamora cuyos ramas con pinchos se nos clavan salvajemente en las piernas y los brazos- y bajadas que se desmororan bajo el peso de nuestras urban sandalias. El regreso a la ciudad en el coche de Oru es el momento más asfixiante del día, pero cae en el olvido en cuanto Elsie y yo, apeados en mitad de la Avenida Madrid, nos diponemos a bajar hasta nuestra calle (son cerca de treinta minutos de camino) cantando canciones de Formula V, Mecano y El Canto del Loco y silbando al más puro estilo Leonor Watling.

A las ocho de la mañana del encapotado domingo nos dirigimos a Port Aventura (Salou) en el coche de Manel con Abba tronando en nuestra furgoneta psicodélica llamada Verónica. Llegamos cuarenta y cinco minutos tarde y al encontrarnos con Cristina y Raquel en el parque temático, nos sentimos abrumados por los altos decibelios alcanzados por Cristina al echarnos la bronca por la tardanza. Nos subimos en la nueva atracción, Furious Baco, y luego en algunos clásicos del parque como el refrescante Tutuki, el emblemático Dragon Khan o los rápidos. Cabe mencionar el momento "El grito" de Munch en el barco balanceador frente al entusiasta grupos de japoneses fashion. Caen otras atracciones más light, algunos espectáculos y el Estampida que deja un profundo dolor de cabeza en algunos de nosotros. Después de la comida, el grupo de música formado por vaqueros -con un indio bajista ¿?- nos da las gracias por nuestro entusiasta atención. El retorno a la civilización es sosegado con Miguel Bosé, Rafael y su "Aquarius" y la flamenca versión de "Un beso y una flor". Punto final.

miércoles, 1 de agosto de 2007

Lore's premonitions

Éste es mi modelo conversacional:

Lorelai: Creo que estoy en contacto con el otro lado
Rory: ¿Con quién?
Lorelai: Con el otro lado
Rory: ¿Con los republicanos?
Lorelai: No, te hablo sobre extrañas premoniciones
Rory: ¿Sí? ¿Sobre qué?
Luke (sirviendo sus platos): Vaca muerta y vaca muerta
Lorelai: Es raro
Rory: Siempre
Lorelai: Hablo sobre mis premoniciones sobre la muerte, mi muerte.
Rory: No lo quiero oír
Lorelai: Y el caso es que son siempre muy tontas
Rory: ¿Cómo de tontas?
Lorelai: En una me resbalo y me caigo en un cubo gigante de nata montada
Rory: Tonta y engorda
Lorelai: En otra me come una tortuga
Rory: ¿Una tortuga? ¿Cómo?
Lorelai: Muy despacio y masticando mucho
Rory: ¿Y en tu premonición no podías escapar del que es probablemente el animal más lento de la tierra?
Lorelai: Al primer mordisco me paraliza con su veneno
Rory: Eso lo explica
Lorelai: Y la última es la mas siniestra. Salgo a cazar
Rory: Una te tus aficiones favoritas
Lorelai: La escopeta me estalla en la cara y la cabeza gira varias veces y acabo con la cara hacia atrás, como el Pato Lucas
Rory: Ésta es la más tonta de todas
Lorelai: Mira, si muero así, prométeme que volverás a ponerme la cara en su sitio como hace el Pato Lucas con su pico
Rory: Debería apuntarlo
Lorelai: Acuérdate de que la cara me quede hacia delante
Rory: Depende de como te portes