Una semana más tenemos a Vicky en el ojo de huracán. Antes de continuar, vamos a hacer un repaso del expediente de la chica oyster.
Gala 0: la más serena para la concursante. Risto admite su favoritismo hacia Vicky. Esta declaración de uno de los miembros del Jurado da inicio a una fatalidad que se cernirá sobre la concursante.
Gala 1: Risto, aprovechando los minutos que le conceden para hacer la valoración de la concursante, le advierte a ésta de las críticas que recibe a sus espaldas. El conocimiento de esta verdad hace que Vicky rompa a llorar (como era natural). Las criticas continúan dentro de la academia.
Gala 2: En las valoraciones del Jurado, Llano se equivoca en el veredicto y nomina a Vicky. A la concursante (como era natural, again) se le muda el rostro al saber que no va a cruzar la pasarela. Noemí se apercata del error y corrige la resolución de Llano.
Gala 3: Noemí nomina a Vicky argumentando que, si bien se ha mostrado como la alumna perfecta a lo largo de la semana, en la gala ha pinchado. Rápidamente Risto expresa su desacuerdo (como era natural, again again). En un inteligente movimiento de ajedrecista experimentado, nomina a la insufrible de Tania S., obviando la decisión previamente tomada por los cuatro miembros del Jurado.
Esto resalta lo siguiente:
Risto vende dos productos con un único movimiento de ficha. Por un lado, potencia la imagen de Vicky como “La Cantante” que debe competir contra flequillos platinos, glúteos de karateka y varios pares de pendientes de choni. Por otro, se reinventa a sí mismo y se hace campaña con ese tono mesiánico de quien está llamado a mostrar el verdadero camino de la música. Pese a perseguir con ello su revalorización (y indirectamente la de su concursante favorita), no deja de valerse de argumentos bien sólidos. ¿Es posible que el programa considere que han cantado mejor Tania S., Sandra o Iván, cuya actuación reconocen haberles aburrido enormemente?
Este juego casi de trilero que está llevando a cabo el programa me parece un arma de doble filo y la principal víctima podría ser Vicky. La próxima edición Noemí, Risto y Llàcer renovarán contrato, pero ¿dónde estará Vicky si en uno de estos juegos de prestidigitador del publicista y Compañía acaba siendo expulsada a los pocos programas? Además, ¿no le está reportando esto una incómoda situación a la concursante, viéndose como motivo de disputa y de conflicto entre profesores y alumnos en un deplorable "todos contra todos"? Cada semana su nominación supone disensión y disputa (con daños colaterales como el de hoy) entre el Jurado. Afortunadamente, Vicky no pierde de vista el objetivo (“cantar”) y no se desorienta en medio de un programa que, cada vez más, tiene visos de Gran Hermano. Por suerte también, Vicky se ha aprendido la lección: “no morder la mano del que te da de comer”. De esta manera, a la pregunta sobre qué opinaba de tener el apoyo de Risto y los profesores, la concursante ha respondido que se alegra de tenerlo. ¡Sensata, inteligente y honesta! Hubiera quedado mal pecar de inmodestia...
Gala 0: la más serena para la concursante. Risto admite su favoritismo hacia Vicky. Esta declaración de uno de los miembros del Jurado da inicio a una fatalidad que se cernirá sobre la concursante.
Gala 1: Risto, aprovechando los minutos que le conceden para hacer la valoración de la concursante, le advierte a ésta de las críticas que recibe a sus espaldas. El conocimiento de esta verdad hace que Vicky rompa a llorar (como era natural). Las criticas continúan dentro de la academia.
Gala 2: En las valoraciones del Jurado, Llano se equivoca en el veredicto y nomina a Vicky. A la concursante (como era natural, again) se le muda el rostro al saber que no va a cruzar la pasarela. Noemí se apercata del error y corrige la resolución de Llano.
Gala 3: Noemí nomina a Vicky argumentando que, si bien se ha mostrado como la alumna perfecta a lo largo de la semana, en la gala ha pinchado. Rápidamente Risto expresa su desacuerdo (como era natural, again again). En un inteligente movimiento de ajedrecista experimentado, nomina a la insufrible de Tania S., obviando la decisión previamente tomada por los cuatro miembros del Jurado.
Esto resalta lo siguiente:
Risto vende dos productos con un único movimiento de ficha. Por un lado, potencia la imagen de Vicky como “La Cantante” que debe competir contra flequillos platinos, glúteos de karateka y varios pares de pendientes de choni. Por otro, se reinventa a sí mismo y se hace campaña con ese tono mesiánico de quien está llamado a mostrar el verdadero camino de la música. Pese a perseguir con ello su revalorización (y indirectamente la de su concursante favorita), no deja de valerse de argumentos bien sólidos. ¿Es posible que el programa considere que han cantado mejor Tania S., Sandra o Iván, cuya actuación reconocen haberles aburrido enormemente?
Este juego casi de trilero que está llevando a cabo el programa me parece un arma de doble filo y la principal víctima podría ser Vicky. La próxima edición Noemí, Risto y Llàcer renovarán contrato, pero ¿dónde estará Vicky si en uno de estos juegos de prestidigitador del publicista y Compañía acaba siendo expulsada a los pocos programas? Además, ¿no le está reportando esto una incómoda situación a la concursante, viéndose como motivo de disputa y de conflicto entre profesores y alumnos en un deplorable "todos contra todos"? Cada semana su nominación supone disensión y disputa (con daños colaterales como el de hoy) entre el Jurado. Afortunadamente, Vicky no pierde de vista el objetivo (“cantar”) y no se desorienta en medio de un programa que, cada vez más, tiene visos de Gran Hermano. Por suerte también, Vicky se ha aprendido la lección: “no morder la mano del que te da de comer”. De esta manera, a la pregunta sobre qué opinaba de tener el apoyo de Risto y los profesores, la concursante ha respondido que se alegra de tenerlo. ¡Sensata, inteligente y honesta! Hubiera quedado mal pecar de inmodestia...
La Gala 3 ha supuesto una mejora considerable respecto a la anterior. Vicky estuvo mucho más suelta en el escenario demostrando una mayor seguridad. El tema lo defendió con creces, a pesar de contar con un partenaire tan soso como Rubén. Sin embargo, la estrella de la noche fue nuevamente Chiper quien cantó una mis temas preferidos Dancing in the street (todavía recuerdo el momento en que Beatriz Luengo salió a la Plaza España madrileña a bailarlo junto a Benny -el genial Asier- en aquel capítulo en que ella y Mónica Cruz lideraban dos grupos distintos en baile moderno, y la hermana de Pe reunía para su grupo a todos los amigos de Bea para su fastidio -eran el periodo dorado de la serie-). Por su parte, Noelia recibió unas críticas injustas, pues le sobra presencia y voz sobre las tablas -muchos deberían aprender de ella-. Y por último, Manu, aunque encandila durante sus actuaciones, resulta cada vez más fastidioso con tanto lloro y tanta emoción desatada -creo que ha superado los niveles en uno y otro sentido que fijaron Bustamente y Bisbal, respectivamente-.
Vídeo Virgi y Rubén interpretando "Isla de Palma":
Vídeo de la nominación de Virginia y la reacción de Risto:
Vídeo de la justa venganza de Risto:
Vídeo de la actuación de Chipper y Reke:
Vídeo de la nominación de Virginia y la reacción de Risto:
Vídeo de la justa venganza de Risto:
Vídeo de la actuación de Chipper y Reke:
Otros capítulos:
Gala 0: The Return of Risto...