miércoles, 24 de octubre de 2007

More books at home

Ésta semana es mi particular marathon candeliana. Con motivo de una cercana exposición de tema libre -siempre y cuando esté ceñido al período (o periodo, doblete permitido por la RAE) que abarca la asignatura-, he escogido a Candel (bueno, no a todo el Candel, que es mucho Paco Candel, sino al Candel-escritor-téstigo) como objeto de la misma. Por eso y porque la biblioteca de mi barrio lleva su nombre y, por tanto, dispone de un surtido fondo del escritor y también -y aquí viene el "porque" más discutible- porque el préstamo normal de las Universidades es de solo tres libros al mismo tiempo y ya tenía retirados el máximo de libros permitido.
En una carrera como la mía, donde si sigues el itinerario curricular recomendado, tienes como mínimo 2 o 3 asignaturas de literatura (de configurártelo de otra manera puede ser mayor el número) por cuatrimestre con una media de lecturas obligatorias de 6 libros mínimo por asignatura (dejemos de lado lecturas adicionales o complementarias), la normativa actual de préstamo es claramente deficiente. No sólo necesitamos libros para las asignaturas de literatura, sino que para cualquier otra asignatura también nos exigen leer manuales, gramáticas, publicaciones varias... ¡El número de libros que te puedes llevar a todas luces es insuficiente! Entiendo que la duración del préstamo no puede ser mayor a diez días (las reservas del libro se multiplicarían), pero la ampliación del número de libros que puedes llevarte prestado cuando estudias una carrera que trabaja básicamente con ellos, es esencial. A veces, debido a los programas recargados de lecturas, no podemos dar prioridad a un libro en detrimiento de otro, sino que te ves obligado a simultanear las lecturas para poder seguir el ritmo de clase. Además, en ocasiones necesitas diferentes obras para contrastar y su presencia física es de gran ayuda.
Mi caso es el siguiente. La semana pasada cogí de la Biblioteca de la Universidad de Barcelona:
1. Correspondencia entre Pedro Salinas y Jorge Guillén (tengo un examen el día treinta que versará sobre el problema del exilio y la lectura es obligatoria).
2. Fundamentos de morfología (para arrojar algo más de luz al ejercicio que tenía que presentar hoy.)
3. Historia de la literatura española. Siglo XX. (para tener una visión general del panorama literario).
¡Ahora! Tengo que hacer una exposición. Necesito empezar a hacerla ahora para que el tiempo no se me eche encima, pero no puedo disponer de más libros en la Universidad. Si sólo necesitara un libro, siempre podría tratar de acabarme uno de los tres libros mencionados y hacer un change. El problema es que para la exposición necesito varios: tres novelas y un ensayo. La posible solución es recurrir a una biblioteca municipal donde el préstamo es de seis libros (amén de cedés, devedés y publicaciones). Lo que ocurrió: el lunes tuve que desplazarma hasta la biblioteca de mi barrio de donde volvería cargado con Els altres catalans, Donde la ciudad cambia de nombre (segunda vez que me lo leo) y Han matado un hombre, han roto un paisaje. !Ah! Además me lleve un tomo de Crítica y mi prima una librito de Pesadillas y una película infantil. Resulta increíble que en la Univesidad parezca que mendigue libros -ya he comprado suficientes como para llenar la habitacion con varios centenares de ellos en mis años académicos-mientras que de la municipal salía como quien sale del Mercadona habiendo hecho la compra semanal.
De paso, aprovecho para expresar mi confianza de que el Gobierno español siga apoyando a las entidades y colectivos que luchan contra la Comisión Europea 92/100/CE sobre derechos de alquiler y préstamos que obliga a pagar 1€ por ejemplar prestado.

1 comentario:

Elsa dijo...

Albert, si alguna vez necesitas más libros de los que te permite tu carnet de Biblio. de BArcelona, te ofrezco el mío (es decir, a acompañarte y a que ocupes parte de mi cupo de libros) con la condición que los devuelvas con tiempo y que no me impongan ninguna multa; creo que mi carnet UPC no te puede servir de mucho a no ser que tu carrera de un giro radical hacía las ciencias más exactas.
Apoyo también igual que tu las medidas en contra del pago por préstamo. Defiendo la biblioteca como un lugar de intercambio libre de cultura gratuita; ¿lo hacen debido a la ley de propiedad intelectual? ¿No creen los autores, que las bibliotecas son un buen medio para darse a conocer?
Los libros, como los discos o películas, son objetos que, aunque no son importantes por su envoltorio, si no por su contenido, que es donde realmente se encuentra su valor, algunas personas ansíamos tener en nuestras casas, en forma de colecciones y como si fueran un bien personal. Personalmente, si leo un libro de la biblioteca y me gusta, no dudaré en comprármelo, los precios son muy competitivos y estan al alcance de un bolsillo medio como el mío, incluso algunos los compro sin el previo paso de haberlos leído de la biblioteca. Pero, ¿y la gente que no tiene esa posibilidad de comprárselo, o que los necesita como material de consulta? ¿Porqué quieren acabar de convertir la cultura en un negocio destinado solo a mover dinero?